Miguel Angel Pastor, abogado demandante, gerente de área de
ANSES durante la gestión de Sergio Massa
y director del Centro Interamericano de Seguridad Social en México ha
logrado, por el término de tres meses, a través de una medida cautelar, un
amparo en defensa del fondo de garantía del ANSES, frenar la ley del ejecutivo
que es la columna vertebral para permitir el desguace del servicio previsional
argentino.
Esta situación, señaló Pastor, ya pasó con Krieger Vasena
durante el gobierno de facto de Onganía. Lo mismo ocurrió con Martínez de Hoz
cuando eliminó las contribuciones patronales. Luego Caballo con la herramienta
de la “emergencia económica” transfierió todos los recursos de ANSES al Tesoro
que produjo la crisis que llevó a la privatización del sistema y la aparición
de las AFJP.
Según Pastor, el gobierno de Macri está repitiendo esas
situaciones que llevaron al descalabro del sistema previsional y lo graficó con
una vieja frase de Einstein: “Hacer lo mismo y esperar resultados distintos es
el principio de la locura”.
El amparo presentado no afecta de ningún modo el cobro de
las sentencias a favor de los jubilados. El amparo pide que no se vendan los
activos del fondo de garantía para pagar las deudas con los jubilados, sino que
el pago se realice con la partida del presupuesto nacional de 12.500 millones
dólares con la que se venían pagando las sentencias.
Estas
medidas del ejecutivo son son meros errores de sus funcionarios porque “están
aprendiendo”, según Pastor, responden a una postura del Banco Mundial, cuyas
consultoras están actualmente trabajando dentro de la ANSES, que marca que los
países subdesarrolados o en vías de desarrollo, no deben gastar más del 4,5 ó
5% del PBI en materia de seguridad social. La Argentina estaba en 9,2. Entonces
hay que reducirlo a la mitad. “Para poder hacer eso hay que hacer trizas al
fondo de sustentabilidad” sentenció.
