16 de diciembre de 2016, Ciudad de Buenos Aires
Sr. Presidente de La Nación, Ing. Mauricio Macri
Sr. Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación
Productiva, Dr. Lino Barañao
Imaginamos que están enterados mejor que nadie
del brutal ajuste que se está aplicando al sistema científico-tecnológico de
nuestro país. Gracias al presupuesto totalmente insuficiente presentado por la
alianza Cambiemos y aprobado con el apoyo de diversos bloques, el sistema
científico y tecnológico hoy cuenta con al menos 3000 millones de pesos menos
que los necesarios para mantener un funcionamiento armónico y acorde al
crecimiento que venían experimentando las distintas instituciones de investigación
pública del país.
Esta política de ajuste y achicamiento tiene
diversas consecuencias negativas. Por un lado, entendemos que representa un
perjuicio para el país, dado que líneas enteras de investigación quedarán
truncas y los equipos de trabajo en funcionamiento se resentirán al ver partir
a los investigadores que venían trabajando en esos proyectos. A su vez, los
investigadores e investigadoras jóvenes que venimos desarrollando nuestra labor
científica de manera precaria, durante 5 a 7 años con becas doctorales y
posdoctorales, veremos seriamente afectadas nuestras posibilidades de continuar
investigando, dado que nos encontramos en una posición de total vulnerabilidad.
La “fuga de cerebros” -tan conocida por nuestro pueblo- es la consecuencia
directa de esta situación: al cerrarse las puertas de los organismos de
investigación nacionales, nos veríamos forzados a seguir nuestra carrera en el
exterior, tirando por la borda 7 años de inversión estatal en formar compañeros
altamente calificados, que podrían estar investigando en el país para resolver
los problemas de la sociedad argentina.
Entrando en las semanas de las fiestas, nos
encontramos con la primera muestra de cómo se pretende materializar el ajuste:
el CONICET anunció que ingresarían solamente 385 investigadores/as al
organismo, cuando en los últimos años ingresaron más de 600-700 por año,
llegando a superar los 900 ingresos en 2015 y 2016. En efecto, el viernes 16/12
se dieron a conocer los escandalosos resultados de la convocatoria, dejando
fuera a 1141 investigadores, 489 de los cuales han recibido un dictamen
favorable de las comisiones evaluadoras del organismo, que recomendaron su
ingreso. Es decir, casi 500
investigadores/as que aprobaron todas las instancias de evaluación a las que
fueron sometidos, se están quedando sin trabajo por el simple hecho de que no
hay presupuesto. En cualquier contexto laboral, esta situación es conocida como
un despido. ¿Es este el plan de la
actual gestión para el desarrollo científico-tecnológico del país? ¿Qué
política científica se impulsa al abrir las puertas a la fuga de cerebros y
limitar el presupuesto de los grupos de investigación?
Como saben, quienes integramos la comunidad
científica rechazamos este brutal ajuste. Tal como nos movilizamos masivamente
el 27 de octubre al Congreso para exigir un presupuesto acorde a las
necesidades del sistema de CyT, el miércoles 14 de diciembre volvimos a las
calles de forma masiva para reclamar ante las autoridades del CONICET por la
incorporación de todos/as los/as compañeros/as recomendados/as para ingresar al
organismo. Realizamos dos cortes en Av. Santa Fe y una ocupación pacífica del
edificio, luego de lo cual conseguimos que el Directorio se expida públicamente
pidiendo más presupuesto para poder concretar el ingreso de más
investigadores/as. No solo hubo una movilización a la sede central de CONICET,
sino que hubo manifestaciones en distintas ciudades del interior (en Misiones,
La Plata, Mar del Plata, Mendoza, Córdoba, Rosario, entre otros), reflejando
que el ajuste se está sintiendo en todo el país. El Directorio respondió
declarándose “preocupado” por la situación presupuestaria el día jueves,
prometiendo buscar más financiamiento, para luego proceder el día siguiente a
publicar los bochornosos resultados, con más de 1100 investigadores rechazados
en su ingreso al organismo.
Sres. Presidente de la Nación y Ministro, ¿no
ven con preocupación este brutal ajuste? ¿Qué tienen para decirle a los cientos
de investigadores e investigadoras que, debido al recorte, se están quedando en
la calle, aun habiendo sido recomendados/as por las comisiones evaluadoras? ¿No
dijo, Ministro, que en caso de no contar con los fondos necesarios para
continuar con el crecimiento del sector científico daría un paso al costado? Si
no tuvo capacidad para reunir los tan solo 150 millones de pesos necesarios
para que ingresen los/as recomendados/as por el organismo (una cifra muy
inferior respecto de los 3000 millones que fueron recortados de la propuesta
original de presupuesto del MinCyT), ¿por qué deberíamos creer que siquiera lo
intentó? Es una exigencia de la comunidad que comunique los avances en la
gestión de conseguir más presupuesto tal como prometió hace varios meses, de
cara a que se pueda producir el ingreso de todos/as los/as compañeros
recomendados. Y si no puede dar respuesta, hágase cargo y asuma las
consecuencias del ajuste, que hoy en día pesan sobre cientos/as de
investigadores/as que se están quedando en la calle por la asfixia
presupuestaria.
Este lunes 19/12 nos volveremos a movilizar
masivamente al Polo Científico, para exigir al CONICET respuestas ante los 500
despidos injustificables que se plantean en la actual convocatoria. Pero
también iremos al Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva a
buscar explicaciones, pues vemos una constante justificación del ajuste de
parte de sus autoridades, lo que sabemos que no representa la voz del sector.
En el marco de esta movilización, le exigimos, Ministro, que pida partidas
adicionales para permitir los ingresos a CIC de CONICET, como dijo que haría en
distintas oportunidades. Exijimos que nos reciba para respondernos las
preguntas formuladas en esta carta y tantas otras que tenemos. Pero sobre todo,
para atender el reclamo de los cientos de compañeros y compañeras que confiaron
en formarse en el país, que aprobaron todas sus evaluaciones y se los está
dejando en la calle por el simple hecho de aplicar un brutal ajuste económico.
Jóvenes Científicos Precarizados