En el Sur, la hermana de la vicepresidenta y el
entorno de la Fundación construyeron complejos habitacionales que luego negaron
en la Justicia. Los documentos.
La causa que investiga el origen de los fondos
que le robaron a la vicepresidenta Gabriela Michetti continúa escribiendo
nuevos capítulos y llegan a lugares impensados: en un informe exclusivo, El
Destape pudo revelar que la hermana de la vicepresidenta explota junto a la
mujer del empresario de medios Luis Majul y el entorno de donantes y creadores
de Fundación SUMA, al menos cuatro complejos habitacionales en El Calafate,
construidos sobre terrenos pertenecientes a una familia señalada por comprar
tierras a $7,50 el metro cuadrado.
El primero de los complejos en cuestión se llama
Morenas, y queda sobre la calle Los Álamos, a sólo unas cuadras del ya conocido
hotel Los Sauces, vinculado a la familia Kirchner. Se trata de un terreno que
cuenta con seis unidades de entre dos y tres ambientes, y que es rentado en
forma anual por empresas que residen en Calafate.
Según la escritura a la que pudo acceder El
Destape, el primer departamento corresponde a María Elizabeth Conte Grand,
esposa del empresario Luis Majul, quien se desempeñó durante años como tesorera
de Fundación SUMA y además fue empleada de Michetti dentro del Senado gozando
un contrato de alta categoría.
Conte
Grand de Majul fue una de las personas que atestiguó en la causa que investiga
el origen de los fondos robados a la vicepresidenta. Allí negó cualquier
actividad comercial relacionada a la explotación de un inmueble a su nombre en
El Calafate: “Actualmente no estoy en una actividad laboral plena, tampoco
tengo ingresos mensuales asegurados", explicó la esposa del conductor de
La Cornisa, quien al momento de responder si cuenta o contó con "otra
actividad lucrativa" aseguró que "no" y que cuando ejerció
anteriormente "como cocinera tampoco".
La unidad dos del complejo se encuentra a nombre
de uno de los creadores de Fundación SUMA: el abogado Carlos Díez, socio del
juez de la Corte Suprema Carlos Rosenkrantz. Si bien Diez no cuenta con ningún
cargo formal en la organización que preside Michetti, sí se reconoce como una
de las personas que contribuyó a su creación, e incluso, se lo puede observar
en su primer spot institucional.
En su declaración testimonial en la causa que
busca acreditar el origen de las bolsas con dinero dentro del departamento de
la vice, Diez admitió haber donado unos $7.000 y, sobre su profesión, declaró:
“Soy abogado de manera independiente desde el año 1986. Me recibí ese año y
ejerzo la profesión desde esa época, mis ingresos son realmente muy variables
pero si tuviera que estimar un monto aproximado que percibo por mes es
alrededor de 45.000 pesos", al tiempo que negó tener otras actividades
comerciales.
La tercera unidad del complejo no se encuentra a
nombre de una persona física, sino más bien de una empresa: Atton S.A. La
titular de la firma es Silvina Michetti, hermana de la vicepresidenta, quien es
dueña de unos 7 locales de la tintorería 5ASEC en el país.
Con sede en Capital Federal, Atton S.A figura
inscripta en AFIP bajo la categoría 960102: Lavado y limpieza de artículos de
tela, cuero y/o piel, incluso limpieza en seco", y cuenta con una
actividad secundaria relacionada a los negocios inmobiliarios. Su facturación
anual se estima entre los $100.000 y los $500.000. Sin embargo, según
confirmaron fuentes inmobiliarias a este medio, la firma contaría con 5
departamentos en este tipo de estructura, por lo que, de encontrarse todos los
inmuebles alquilados, la cifra superaría largamente ese monto.
Como si esto fuera poco, en la declaración
brindada en sede judicial la semana pasada, Silvina Michetti aseguró contar con
un ingreso mensual de $65.000 y que en 2015, al momento de realizar la donación
en favor de SUMA, percibía entre $35.000 y $45.000, cifra que queda en el
centro de la escena al repasar los cinco títulos inmobiliarios con los que
contaría en el sur del país.
Además, al igual que en los casos anteriores,
Silvina Michetti negó tener otra actividad comercial en el Juzgado Federal
Número 4 de Ariel Lijo, lo que deja en evidencia que ninguno de los declarantes
quiso blanquear su relación comercial con otros miembros o donantes de la tan
cuestionada Fundación que preside la vicepresidenta.
Otra persona que cuenta con un departamento en
el complejo Morenas es Claudia Del Valle Nunia, quien fue denunciada
recientemente en la causa que investiga el origen de los fondos robados a
Gabriela Michetti por falso testimonio: Nunia omitió ser socia comercial de
Silvina Michetti en una sociedad que lleva el nombre de SIL S.A, también
dedicada al negocio tintorero.
Cuando en el Juzgado se le preguntó por sus
actividades comerciales, Nunia, bajo juramento, respondió: "En este
momento sólo hago consultoría", al tiempo que afirmó estar inscripta en
AFIP bajo la categoría I, por lo que cuenta con ingresos brutos de hasta
$400.000 anuales.
El último caso es el de Susana Moncla, esposa
del contador y amigo personal de Michetti, Marcelo Domínguez. Moncla cuenta con
el departamento 6 de este complejo. Domínguez se reconoce como una persona del
círculo íntimo de Michetti, probablemente por las buenas migas que mantienen
desde Laprida, pueblo natal de ambos. Sin embargo, al declarar en la causa, el
contador de la vice confesó no haber participado del acto de entrega de los
USD50.000 que el novio de la ex senadora le habría entregado para que su hijo,
Lautaro realizara una maestría.
Este entramado de sociedades con vínculos tan
cercanos a la Fundación y a la vicepresidenta no se detiene allí: existen otros
3 complejos habitacionales montados sobre terrenos que fueron comprados por
terceros a $7,50 el metro cuadrado, que hoy funcionan a nombre de los
mencionados, que durante la semana en se irán develando en una investigación
exclusiva de El Destape.
Fuente: El Destape