El porcentaje está conformado por explotaciones
agropecuarias de unas 22.000 mil hectáreas cada una. "Las cifras son
alarmantes", advierten especialistas.
Hace una semana, los vecinos de El Bolsón se
movilizaron para rechazar el loteo de tierras para desarrollar un proyecto
inmobiliario de una empresa de a Joe Lewis.
El 0,94 por ciento de los grandes dueños de la
tierra concentra el 33,94 por ciento de la superficie productiva en la
Argentina. Ese casi uno por ciento está conformado por explotaciones
agropecuarias de unas 22.000 mil hectáreas cada una. "Las cifras son
alarmantes", dijo el director de la ONG Oxfam para América Latina y el
Caribe, Simon Ticehurst, y señaló que ese nivel de concentración de la tierra
"no ofrece un camino para el desarrollo sostenible, ni para los países, ni
para las poblaciones".
El escenario empeora en América Latina, donde
sólo 1 por ciento de las fincas acapara más de la mitad de la superficie
productiva. "Es decir, que este 1 por ciento concentra más tierra que el
99 por ciento restante", precisó la ONG internacional, que está presente
en varios países.
"La mayoría de los gobiernos de la región,
independientemente de su color político, han mantenido la apuesta por el
extractivismo -un modelo productivo basado en la extracción y explotación de
los recursos naturales para obtener grandes volúmenes de materias primas- como
el principal motor de sus economías", indicó el informe y agregó que los
combustibles fósiles, metales, madera, carne y vegetales representan juntas más
de la mitad de las exportaciones totales en la mayoría de países de la región.
Además, consideraron que Argentina es miembro
destacado de las "repúblicas unidas de la soja". Allí reportan
también -por orden de importancia- Brasil, Paraguay, Bolivia y Uruguay, donde
se produce "más de la mitad de la soja consumida en todo el mundo",
indicó.
"Entre 1990 y 2014, triplicaron el área de
cultivo y quintuplicaron la producción hasta alcanzar conjuntamente más de 150
millones de toneladas en 60 millones de hectáreas, una extensión más grande que
la superficie de Paraguay y Uruguay juntos", precisó.
El informe detalla, además, que América Latina
es la región del mundo "más desigual en cuanto a la distribución de la
tierra". Al utilizar el coeficiente de Gini para la tierra -donde 0
representa la mínima desigualdad y 1 representa la máxima desigualdad- es de
0,79 para el conjunto de la región: 0,75 en América Central pero trepa hasta el
0,85 en América del Sur. "Se trata de niveles de concentración muy
superiores a los observados en Europa (0,57), África (0,56) o Asia
(0,55)", indicó.
"Pretender saber quiénes son los dueños de
la tierra en América Latina resulta una misión imposible. La opacidad en las
transacciones, el uso de sociedades pantalla, la titulación a nombre de
terceros y el secretismo y barreras burocráticas en las instituciones que
administran los catastros y registros públicos de la propiedad crean un escudo
que oculta la verdadera identidad de los propietarios", señalaron desde
Oxfam mientras en Argentina se produjeron nuevos conflictos vinculados a la
titularidad de la tierra.
La semana pasada, los vecinos de El Bolsón, en
Río Negro, se movilizaron para rechazar el loteo de tierras para desarrollar un
proyecto inmobiliario de una empresa de a Joe Lewis, el multimillonario amigo
del presidente Mauricio Macri. El proyecto Laderas, que se construiría en el
cerro Perito Moreno, prevé edificar una villa turística sobre 600 hectáreas de
una zona considerada reserva natural.
A los pocos meses de asumir, el presidente Macri
modificó por decreto la Ley 26.737 de Tierras Rurales para quitar restricciones
a la venta de campos a extranjeros. La norma habia sido sancionada en 2011 y
establecía un límite del 15 por ciento a la compra de tierras por parte de
extranjeros. Restringía, además, a un máximo de 1.000 hectáreas para titulares
de otros países en la zona agrícola, en el norte de Buenos Aires, y el sur de
Córdoba y Santa Fe.
Fuente: El Destape