El mafioso cree que todos son de su condición
El Presidente participó de un foro organizado
por exmandatarios y empresarios, en el que aprovechó para apuntar contra los
sindicatos de maestros, a los que calificó como “un grupo que se resiste
privilegiando su poder personal” y que se comporta “de manera mafiosa”.
El presidente Mauricio Macri participó de la
apertura de un debate en el hotel Sheraton de Retiro, organizado por la
Fundación Círculo de Montevideo. Los convocantes fueron los expresidentes
Ricardo Lagos (Chile), Julio María Sanguinetti (Uruguay), Fernando Cardoso
(Brasil) y Felipe González (España): "Cuatro maestros, cuatro capos como
dicen los chicos ahora, porque gobernaron bien y le hicieron mucho bien a sus
sociedades", los definió Macri.
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Ante una consulta de Sanguinetti por sus
impresiones en lo que lleva al frente del Gobierno, Macri aprovechó para
reflotar sus críticas a los gremios docentes, que siguen en conflicto en la
provincia de Buenos Aires y a nivel nacional mantienen el reclamo por la
paritaria federal. Mañana los docentes bonaerenses harán una jornada provincial
de protesta, sin paro, en reclamo de la devolución de los montos descontados de
sus salarios por los días de huelga.
Macri sostuvo que el sistema educativo argentino
"está en crisis" y que su objetivo es “mejorar los niveles de
educación” pero se topó con “límites”. “Hay un grupo que se resiste desde
privilegiar su poder personal, un pequeño nicho de poder ejercido a veces de
manera mafiosa", dijo en referencia a los sindicatos.
No es la primera vez que el Presidente ataca
directamente a los gremios docentes en medio del conflicto por las paritarias.
El 1° de marzo, en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso, había
pedido una ley para cuidar a los maestros de las agresiones, aunque señaló que
el titular del gremio bonaerense Suteba, Roberto Baradel, no necesitaba que
"nadie lo cuide". El dirigente se encontraba en ese momento bajo
amenazas contra él y su familia.
El 16 de marzo, en su página de Facebook, Macri
agregó un mensaje de tinte bélico contra los sindicatos al publicar una foto de
un maestro dando clases sobre las ruinas de Hiroshima, Japón, tras la caída de
la bomba atómica. “Para que un país pueda levantarse la escuela nunca debería
parar", escribió. Luego, el 11 de abril justificó la represión a los
docentes que intentaron montar la Escuela Pública Itinerante frente al Congreso
como modo de protesta alternativo a las huelgas. “En vez de dar el ejemplo, en
vez de cumplir las normas, las violan",
dijo entonces en referencia a la supuesta ausencia de un permiso
municipal para levantar la estructura.
La felicidad y Venezuela
En el debate en el Sheraton el mandatario se
limitó a repetir su libreto made in Durán Barba. Al ser consultado por el
chileno Lagos sobre el desafío de sacar gente de la pobreza y luego satisfacer
las demandas de segunda generación de la nueva clase media, Macri se limitó a
afirmar que “al final del camino estamos acá en este mundo para intentar ser
felices”.
“¿Qué es lo que verdaderamente nos hace felices?
¿Saber que conservamos un derecho y sin ninguna obligación, sin ningún desafío?
¿Nos hace felices una vida sin ningún desafío, sin superarnos?”, preguntó el
jefe de Estado ante el silencio de los exmandatarios.
Luego todos concordaron en sus críticas a la
crisis de Venezuela y al presidente Nicolás Maduro. Macri consideró que la
situación es "catastrófica" e intentó compararla con la de la
provincia de Santa Cruz. “Lo de Venezuela vale para entender lo que pasó en la
Argentina, porque no hay dudas de que caminábamos en esa dirección, destruyendo
los equilibrios institucionales, la libertad de prensa", sostuvo.
Fuente: Página 12